Una sentencia de muerte -Priv. Griffith -

Le tomó de la mejilla y luego le miró a los ojos, casi amenazante.

-Pues espero que sólo me relaciones a mí con el orgasmo -dijo pasando a besarle él también, ayudándole para desnudarse completamente y luego sentándose sobre su cuerpo, en los muslos, haciendo que ambos sexos quedaran unidos y recostándose sobre él, moviendo su cuerpo muy lentamente para que la fricción fuera excitándoles.

-Ah... En cambio yo te adoro -dijo abrazándole y entrelazando sus dedos tras su nuca, apoyándose así a la cama para ir frotando con insistencia- Mmmm.... -tomó una de las manos de Gillthanas y las posó en su trasero- Te dejo tocar todo lo que quieras, por hoy es tuyo... y tú eres mío... -se acercó a su oido- por siempre -le besó de nuevo los labios y apretó más las caderas- ¿Te gusta? Se te está poniendo bastante dura...

-¿Qué quieres decir? ¿Que no quieres que me acueste con nadie más?-lre preguntó acariciándole el trasero para poco después clavarle las uñas y morderse el labio antes de atrapar los ajenos.

-Sería interesante verme en tal situación... aunque podríamos llegar a un acuerdo si tu te comprometieses a lo mismo...-se removió un poco bajo él, rozándose contra su cuerpo, y separando sus propias piernas, chocando con el interior de los muslos del diablo y hacer que él las separase más todavía-. Ah... Hasta donde yo recuerdo te comportabas como un gato... maúlla, Griffith....-le susurró entre leves jadeos, lamiéndole la cara y pellizcándole los pezones con suavidad.

Sonrió a penas y le miró fijamente a los ojos para luego acariciar su mejilla con una mano, rozando más ambos cuerpos y luego pasando a acariciar su cuello con la lengua, meneando el trasero ante las uñas clavas en él.

-¿Te pone que maulle? -susurró apretando su sexo sobre el ajeno y luego sonriendo- No sé si sabré hacerlo muy bien -se acomodó y luego se pegó al oido de Gillthanas, suspirando y jadeando con sensualidad ante la fricción de ambos cuerpos calientes y apasionadas que iban excitándose- Yo me comprometo si tú lo haces -dijo referente a la 'castidad'- No he disfrutado el sexo con nadie tanto como contigo -afirmó sonriendo- Miau... -deslizó una mano por su fuerte brazo- Miau... -lo hacía perfectamente- Ngh... -volvió a gemir, mirándole- Miau...

Gillthanas volvió a resoplpar levemente, pero esta vez por diferentes razones, cerró los ojos un momento, tomándole por el trasero con ambas manos, deslizándolas por sus piernas hasta el interior de los muslos, clavando los dedos allí y volviendo a repetir el proceso. Pegó los labios a su cuello, notando sobre ellos vibrar su garganta a cada maullido, jadeando al notarlo y mordiéndoselo, pasando la lengua por suu yugular.

-Aah... Griffith... joder, muérdeme....-le pidió escurriendo una mano entre ambos para rodear con los dedos el sexo ajeno.

Griffith se sentó sobre su sexo erecto y dejó que Gillthanas acariciara el propio mientras maullaba de vez en cuando, restregando su trasero encima de la hombría con cierta fuerza para adcentarla y erguirla completamente

-Miau... -le miró a los ojos y luego descendió para posarse en su cuello, mordiendo con fuerza sin llegar a hacerle sangrar pero haciendo que le doliera y al mismo tiempo le gustara, sonriendo tras ello- ¿Te gusta? -preguntó abriendo sus nalgas para atrapar aquel miembro y masturbarlas entre ellas, sin que entrarara en su interior- Así... mmmm... -movió sus caderas para que la mano ajena acelera al masturbarler y luego se restregó mejor- ¿Qué quieres hacer conmigo hoy? Sé claro, no sabes cuanto me pone que me lo digas de forma sucia.

-Mmmm... ¿hacerte? Sólo quiero matarte de placer, y que sufras. Que llores pidiéndome que pare porque no lo aguantas más, que te guste tanto que sientas ganas de morirte... Ah, cállate... me pones de una manera insoportable, ¿no puedes ir más despacio?-le preguntó mientras le lamía el cuello y la mandíbula-. Quiero follarte toda la noche... y reventarte por dentro y reventarme yo mientras tanto...

Le empujó hacia atrás, mirándole entonces a los ojos y sentándose en el colchón con el diablo aún encima de él.

-¿Tu no me harás nada a mi? Me dejas todo el trabajo... Con lo enfermo que estoy, qué desconsiderado.... pero quiero hacerte correr muchas veces, hasta que desfallezcas.

Echó a reír de forma sonora y luego le abrazó cuidadosamente.

-Este es el demonio que a mí me gusta -dijo besándole los labios- Pero tampoco quiero tanto tanto tanto, con una o dos veces me sobra, además, tú debes descansar, mañana hay que ir a torturar demonios para que confiesen, así te hallé -dijo tumbándose en la cama y luego masturbándose él mismo, lamiendo uno de sus dedos e introduciéndolo en sus propias entrañas, removiendo- Ah, por cierto... -se levantó un instante y abrió la mesita, sacando un collar con un extraño símbolo- Consideralo un regalo, sé que buscas a tu padre y hasta donde sé esto era de él cuando era joven, el emblema de su família -murmuró sonriendo- Guárdalo hasta que llegue el día.

Gill tomó aquel collar, mirándolo un instante. No recoconió nada en el símbolo, pero sin duda era todo un detalle y de tener un futuro prometedor un objeto bastante útil sin duda. Le miró un momento y sonrió de medio lado.

-En serio que es imposible no amarte...-comentó con una suave risa, negando con la cabeza un momento y guardando aquello un momento en el puño-. Si que he tenido suerte...-afirmó más para si mismo, mientras se inclinaba sobre él a besarle y a apartarle las manos acariciándole él mismo-. Lamento no haberte conocido antes. Me hubiera llevado fatal contigo durante mucho más tiempo...

Echó a reír y luego le palpó la cabeza unos instantes, apretando su sexo.

-Será mejor que hoy no fuerces tu cuerpo con sexo, ayudémonos a eyacular y eso será suficiente por hoy -comentó cerca de su oido para luego besarle los labios- Se buen niño y descansa en cuerpo y mente sino luego te pesará todo y necesito que estés sano y alimentado -le recostó casi por obligación en la cama y fue acariciándole el sexo con la mano, posando la extremidad ajena en la propia- Hazlo tú también -dijo en voz imperativa, mirando la mano cerrada donde tenía el colgante y sonriendo- Me alegro que te haya gustado, en realidad sólo fui a buscartelo para dartelo.

Gillthanas chasqueó la lengua emulando estar molsto y obedeció, tomando el sexo ajeno por la bese, apretándolo un poco e ir subiendo poco a poco con suaves masajes que se iban pronunciando poco a poco.

-Te olvidas de que aquí soy yo el macho-le dijo con la cara pegada a la del diablo, mirándole a los ojos y alargando la lengua hasta sus labios-. Y como tal tengo un aguante que no te lo podrías ni inmaginar. Pero hoy... no te lo demostraré.

Sonrió un instante y asintió a sus palabras, acomodándose lentamente donde estaba y luego besándole los ojos mientras comenzaba a mover sus sexo con la mano, arriba y abajo, deteniéndose a veces en la punta para entretenerse alli y volver a bajar.

-Demuéstramelo mañana, ha sido un día duro para mí y he gastado muchas energias -susurró mirando su propio miembro siendo acariciando y haciendo lo mismo en el ajeno, con su mágina habilidad que había practicado tantas veces- Mmmmm Siempre sabes como hacerlo, no fuerte ni flojo, ni rápido ni lento.... me encanta

-Sólo a ti te lo parece-le dijo sonriendo apoyando su frente contra la ajena y pegándose más a él, dejando que el poco aire que había entre los dos se caldease levemente-. A ti y a mi, claro... No tienes ni idea de cuantas noches tengo pasado en solitario en mi cueva. Era divertido, para qué negarlo... aunque he comprobado que con un diablo idiota se está mucho mejor...

Mientras se detenía a jugietear de vez en cuando sobre el glande, masajeándolo en círculos ayudado por algunas gotas preseminales, desdencía también hasta los testículos para apresalros levemente, apretándolos entre los dedos para ír estimulándolos y que liberasen el preciado tesoro con más fuerza. Se acercó nuevamente a él, besándole repetidas veces, mientras dejaba escapar de vez en cuando algún que otro suspiro, moviéndose un poco.

-Me has hecho la vida más fácil...-murmuró con los ojos aún cerrados-. Y mucho más agradable de vivir.

Le miró a los ojos y luego echó a reír.

-Si no dejas de ser tan cursi vas a dormir en el suelo hasta que te recuperes y te largues de este lugar -comentó entrecerrando la mirada ante un pequeño espasmo y moviéndo de forma casi 'profesional' su mano sobre el sexo, administrándole buena cantidad a cada movimiento para que fuera irguiéndose poco a poco- ¿Te gusta? -susurró en su oido- Aunque la respuesta es más que evidente, tu cuerpo responde por ti -le mordió el cuello con suavidad, moviendo él mismo la cadera para entrar en calor cada vez más- Mmmmm... Me gusta mucho, sigue... Sigue... -apretó sus labios y luego jadeó, estirándose- Ahhh... Así... -le miró fijamente y decidió entonces separarse un poco de su cuerpo para no sufrir tanto calor, poniendo la atención en la mano que masturbaba a Gillthanas- Ah... no me falta mucho, harás que me corra rápido

El demonio le miró un momento a la cara y después terminó de empujarle para ponerle boca arriba, sin apartar la mano de su miembro, para después acercar la boca a él y comenzar a felarlo con agilidad. La otra mano se movía por el vientre de Griffith, apaciriándolo y notando el calor golpeando el interior de su cuerpo a través de la fina piel.

-Adelante... confío en que después me des a mi el mismo trato...-le dijo desde abajo mirándole de reojo, sonriendo a penas mientras pasaba la lengua por toda su extensión y volvía a metérsela completamente en la boca, llegando hasta su garganta donde quedó apretada.

Se aferró a las sábanas y luego apoyó una mano en la cabeza de Gillthanas, cerrando los ojos y arqueando la espalda.

-Ufff... -movió las caderas y apretó los dientes, jadeando por lo bajo hasta que un espasmo le recorrió y terminó por eyacular en la boca ajena- Ahhh... -le miró a los ojos y sonrió, acariciando luego su mejilla y besándole los labios muy lentamente, sonrindo y recostándole en la cama para luego felarle el sexo ajeno con cuidado, introduciendo hasta la garganta la hombría y lamiéndola con su habilidad nata, apretando mientras su mano.

Gill rio a penas un momento dejándose caer en el colchón, acomodándose bajo el diablo y acariciándole la espalda y los cabellos.

-Después de donde vengo todo esto no puede ser bueno... Me sometéis a demasiada presión...-bromeó mordiéndose el labio y moviendo con suavidad las caderas-. Tu también te las arreglas bastante bien... ah.... Sigue Griffith...

Acarició sus testículos para que no fuera a tensarse demasiado y luego apresó la punta del sexo, por el glande, con los labios, moviendo mientras su mano arriba y abajo, observando con sus ojos fijos en los ajenos y oyendo sus pequeños jadeos y movimientos de cadera que indicaban lo mucho que le gustaba.

Lamió con más ansias, profundizando de nuevo en su garganta

El demonio teminó eyaculando entre sus fauces y sus manos, dejando que toda aquella tensión acumulada en aquellos minutos se disolviese de forma agradable, fuertemente en aquel instante.

Cogió al diablo por una de las muñecas, tirando de él con suavidad para ponerlo a su altura y alcanzarle los labios.

-Me alegra saber que tengo a alguien de mi parte-murmuró aún algo jadeante, rodeándole la cintura con un brazo-. Es realmente sosegante.

Le miró a los ojos fijamente y luego le besó los labios con ternura, acariciando su mejilla.

-Pequeño... -dijo con una pequeña sonrisa- Venga, duerme... -le acarició unos instantes la mejilla y luego le abrazó, poniéndose encima de su cuerpo y luego abrazándole por la cintura, besando su cuello con lentitud y mordiendo la piel de su oreja- Te quiero -dijo de pronto apresando sus caderas con las propias, cerrando los ojos- Abrázame.

[Cómo fue lo de bcn?]

[Me cogieron! ^^]


-Qué vas a quererme...-dijo en voz baja sonriendo de medio lado, pasándole el otro brazo por la espalda y dejando un suave beso en su cuello, bajando hasta su hombro y apoyar allí la barbilla, estrechándole con algo de fuerza.

Estaba tan agotado por todo, por aquellas semanas de tortura en las que habían laerado su cuerpo, pero sobre todo su mente, tan cansado de humillaciones que jamás saldrían a la luz y demás que pensaba morirse allí mismo, ahora que estaba liberado al menos momentáneamente y su cuerpo descansaba con suavidad. Abrió los ojos un momento quedándose con la vista perdida en el techo y después le acarició un momento la espalda al diablo quedándose de nuevo en silencio y quieto.

Felicidades!!!!!!!!!! =)!!!! Yo voy y vengo, estoy sudando como un puerco.. xD Luego a la duc ha y me intentaré hacer un peinado chachi que mañana debo ir a recoger las notas =)!!!! Pero bueno, eso más tarde, me quedan alguns ratos más saltando y sudadno]


Le observó unos instantes y luego sonrió de forma infantil, sin decir nada más y quedando abrazado a aquel robusto cuerpo que, a pesar de que no recordara nada, seguía siendo en esencia el mismo, aunque suponía que el sólo pensamiento de que procedía de un ser vivo le había ablandado.

Sus ojos terminaron por cerrarse en aquel preciso instante en el que el cansancio ganó la batalla. Se aferró a su cintura y cayó en los brazos de Morfeo donde, incluso en aquel cándido lugar, sintió las caricias en su espalda de Gillthanas.
El pelo blanco cubría su rostro, no podía ser un demonio, ni diablo ni ser infernal, era como un ángel recien nacido.

Y así se mantuvo durante horas hasta que decidió despertar del letargo.

-MMmmm

[crees que aprobaste todo no?]


El cuerpo de Gillthanas se había quedado tibio, tierno y relajado. Su repiración nunca había sido tan pausada y rítmica y aquellos ojos que siempre permanecían cerrados quizás para aparentar estar dormidos, esta vez si lo estaban. Probablemente por primera vez en toda su existencia se había quedado dormirdo, sin ser consciente de ello y causante de haber caído rendido de aquella forma que ni notó como l diablo se removía al despertar, mientras respiraba dulcemente por los labios entreabiertos.

[Espero que sí >.< Y luego el martes debo ir a hablar con el director del nuevo sitio a ver si puedo cambiarme para segundo =)]

Le observó unos instantes y luego le acarició la mejilla, le parecía sorprendente que estubiera dormido en ese instante, nunca le había visto así.

Le arropó cuidadosamente con la manta y luego le acarició los cabellos, dirigiéndose a su propia cocina después y haciendo un poco de carne para ambos, por si le apetecía comer, aunque sería raro.

En silencio se bebió una cerveza acompañado de aquello, pensativo

[seguro que si apruebas todo = ) . ¿Te refieres a cambiar de centro?]


Lo único que rompió el silencio unos minutos más tarde fue un golpe seco venido del cuarto, seguido de un gruñido de queja. Gillthanas había habierto los ojos lentamente, sin saber muy bien qué ocurría, se sintió desorientado y adormilado, como si se hubiese ido de aquel mundo durante unos instantes, para después cuando se chó hacia un lado supo que no controlaba del todo bien su cuerpo en aquellos momentos, golpeándose contra la mesita de noche y cayéndose de la cama.

A penas le dolió. El hecho de no saber donde estaba durante unos segundos, de no comprender lo que ocurría y lo más importante, el ser consiente de que no sabía nada sobre lo que había podido ocurrir durante aquellas horas, le dejaban expectante.

Se levantó y fue donde Gillthanas corriendo, encontrándose con él en el suelo y empezando a reír, él iba vestido con un albornoz negro de seda. Le tomó de la mano para ayudar a levantar y luego le ofreció una prenda semejante a la suya pero azul marino y más grande.

-Creo que te ha ido bien dormir ¿verdad? -dijo con una ligera sonrisa tomándole de la mano- Estas muy atractivo -le ayudó a vestirse y luego ató el cinto en su cintura- Mmmm.. Hay algo de carne, por si quieres comer -dijo haciendo la cama en un momento y luego bostezando, estirando su cuerpo- Hola!

[Shi!]