Sal de mi cabeza -Priv-

Solte varias carcajadas ante su reaccion, si..definitivamente Kurai no era de esas.
-Como no voy a estar pensando en lo mismo? me sobra líbido cariño- respondi con burla sintiendo como sus manos se enredaban en mis cabellos celestes.
No era una posicion extremadamente comoda pero me valia igual, escuchaba sus rapidos latidos.

-Si estoy comodo...tienes el corazon acelerado por mi presencia Kurai?- pregunte sonriendo con ironia soltando algunas carcajadas. Cerre los ojos y respire profundo pasando mi mano por el hombro de la joven, acariciando esa fina y suave piel.

Si es que le conocia mejor que la madre que le trajo al mundo, si no me hacia falta que nadie me dijera como era, yo misma sabia mas de el que todo el mundo, casi creo que sabia mas de el que el mismo....

-La verdad es que si-conteste sin darle ninguna importancia-me pones cardiaca cuando te me acercas-dije con tono burlesco-para matarme solo tendrias que darme un besito cuando estoy estresada y se me colapsaria el corazon, todo el mundo diria que ha sido una muerte natural y no te pasaria nada-le di un suabe golpe en la cabeza con el puño-pero ni lo intentes o mi fantasma te dara por saco por toda la eternidad-rei un poqeuito para seguir con aquellas caricias y entonces me di cuenta de que yo todabia estaba solo tapada por la toaya-esto Said quiero onerme el pijama....o aolgo que si no me resfriare con esta tela humeda

-La sola idea de tenerte a mi lado fantasmalmente en todo momento me aterra- respondi burlón -asi que supongo que te dejare vivir- sonrei de lado.

Me hice a un lado quedando boca arriba dejando que Kurai pudiera levantarse y ponerse lo que se le antojara. Se me habia quedado el pecho y el rostro algo humedo por estar apoyado sobre la toalla de ella, pero no me importaba.
-Si duermes desnuda no pasa nada, yo procurare calentarte..- murmure con lujuria contenida, llevando mis brazos tras mi cabeza para cerrar levemente los ojos.

Enarque una ceja algo molesta conel comentartio de sentirse aterrorizado por la idea de que le persiguiera como un faqntasma , pero acabe por ignorarle, si tubiera que cabrearme por cada comentario molesto que me hacia no ganaria para enfados.

Said se quito de sobre mi para dejarme lebantar de la cama y vestirme, no sin hacer un comentario lujurioso muy tipico de el en aquel momento referente a que durmiera desnuda que ya me caqlentaria el......mejor hacer como que no lo habia oido, si mucho mejor.

Me lebante de la cama abriendo el armario de aquel cuarto lujoso y mirando la cantidad de ropa de dormir que se encontraba alli por alguna razon que yo no lograba comprender....era como si supieran que alguien de mi estatura y constitucion dormiria aqui hoy...pero aquello era imposible ¿verdad?.

Comence a mirar y mirar, moviendo las perchas para contemplar aquerllos camisones de seda de mil colores y con mil vordados de pedreria, suspirando aburrida por que todo me parecia demasiado hostentoso, la verdad es que yo me conformaba con ropa de dormir bien simple, el caso es que fuera comoda y todos aquellos adornos....buf....estaban muy lejos de ser comodos.

Cerre el armario y abri los cajones, alli estab los pijamas de hombre, mucho mas funcionales y menos decorados, mas bien tirando a simples y feos de eun solo color y decoraciones nulas, eso era lo que yo queria, saque uno de alli, el mas pequeño que encontre, de color negro y manga larga, pantalon y camiseta....comodidad 100%,



Me lo llebe al baño y alli me lo puse, tras mirarme al espejo un supiro escapo de mis lavios,ahora si que parecie un chico...

-No se yo que dira Said cuando me vea con esta pinta-puse los brazos en cruz y di una buelta en el espejo-la verdad es que es comodo pero tengo una pinta de chiquillo....seguro que se rie de mi-abri la puerta y sali fuera esperando el comentario de mi general

Canturree una cancion que habia escuchado en aquella cantina de pasada, no se por que me vino a la mente de repente. Suspire largamente esperando a que Kurai saliera -Por que tarda tanto esa chica, tan solo se trata de ponerse un misero pijama...- me encogi de hombros y me revolvi quedando boca abajo sobre la cama, con los brazos cruzados bajo la cabeza.

Cerre unos instantes los ojos y los matuve asi hasta que ella aparecio ataviado con una ropa de chico.
-Vaya...te sientan bien esas ropas...- murmure con la voz amortiguada por la almohada -anda ven aqui..- o si no te las arrancaré de cuajo y te tomare de nuevo. Di unas suaves palmadas sobre la colcha esperando a que viniera.

Creo que habria preferido que se riera de mi en vez de que me soltara aquello, ahora me sentia como un conejito a punto de combertirse en la cena de cierto tigre ¿se sentirian asi todos a los que se llebaba a la cama? mejor no saberlo.

Camine hasta la cama y me subi a ella tumbandome a su lado cuon un suspiro aburrido mientras mandaba directamente a su cabeza un "estas mas salido que el pico de una plancha" sin darme ni cuenta de ello.

Coloque los brazos tras la cabeza imitando aquella postura que le vi adptar cientos de veces y sonrei de manera cruel, imitandole tambien solo por molestar un poco

Solte una fuerte carcajada al mirarla de reojo -ahora seras mi mimo Kurai?- declare con burla sacandole la lengua de forma infantil. Me posicione de costado con un brazo sobre la cama en donde matenia apoyada la cabeza y posicione un dedo en sus labios que bajo lentamente por su menton y su cuello.
-Oh perdone usted princesita..pero soy un demonio de sangre muy caliente...no habias sopesado ese problema antes de meterte conmigo bonita?- comente de forma medio sugerente y sarcastica.
Sonrei de lado y bese su mejilla -a mi me queda cuerda para rato, pero si estas cansada lo mejor es que durmamos- agregue con cierta seriedad con una voz suave.

Said se rio de mi por imitarle y despues comenzo de nuevo a pedir guerra pero para mi una vez, mi primera vez aquel dia habia sido suficiente y la verdad es que no tenia demasiadas ganas de tener que ducharme por segunda vez hoy.

Me gire para quedar frente a el tumbada de lado y conteste a subeso en la mejilla con uno mio, despues le abrace apollando mi cabeza en su pecho y notando para no variar la diferencia entre el calor de su piel y lo fria de la mia.

-La verdad es que si eres un demonio de sangrew caliente-suspire-me sirbes de estufa muy bien general-bese su pecho desnudo con suabidad y comence a hacer lo de siempre acariciarle con a punta del dedo haciendo dibujitos sobre su piel, escribiendo palabras y pensamientos-es agradable tenerte cerca-sonrei infantilmente-creo que no me arrepentere nunca de lo de hoy-otro pequeño suspiro y cerre los ojos con intencion de dormirme un ratito, al menos si me dejaba

-Y tu eres un maldito tempano de hielo- susurre con una pequeña sonrisa, abrazandola con mis fuertes brazos. Quizas nunca se lo dijera...pero desde esa noche no la protegeria mas como a mi lider si no como a mi objeto mas preciado.

Coloque de mejor forma mi cuerpo para estar comodo y para que ella tambien lo estuviera y se me escapo un gran bostezo que mostro la mayoria de mis colmillos.
-Esta bien....- dije algo somnoliento -yo tampoco me arrepentire- agregue a modo de susurro.
Cerré los ojos manteniendo una mano acariciando los cortos y blancos cabellos de la niña y la otra la pego mas a mi dejandola sobre su espalda.

Said me abrazo tras meterse conmigo diciendome que era un tempano de hielo, pero me daba igual lo veria como un piropo viniendo de el, ademas yo ya sabia que tenia la piel fria, era la costumbre no me quejaria por sus comentarios

Cuando le vi bostezar de aquella manera tan "gatuna" no pude reprimir una risita dibertida, habria apostado que le podia contar los dientes en un bostezo sin mayores problemas, despues dijo que estaba cansado y cerro los ojos para dormirse mientras con una mano acariciaba mis cabellos llenandome de tranquilidad y con la otra me estrechaba por la espalda contra el

-Gracias-susurre antes de cerrar los ojos, pensando en aquellas palabras que decian que el tampoco se arrepentiria de lo ocurrido-buenas noches Said...te quiero

Eché las sabanas por encima resguardando el calor bajo ellas. Aquel lecho sin duda era comodo, pero lo mejor sin duda era la compañia.

Como pasaba a menudo el sueño no tardo en llegarme haciendome caer en un profundo letargo -yo tambien- susurre con voz queda abandonandome al influjo de morfeo.

fin del post