Sal de mi cabeza -Priv-

Suspire pesadamente y me encogi de hombros -muy bien pues seras mi peluche- dije de mala gana frunciendo levemente el ceño. Si ella no queria hacer nada conmigo, era una pena...ahora que se me antojaba tanto...

Vi aquel sujetador y sonrei cuando dijo que pensara en el como un bikini -joder Kurai, pensare en el como me de la gana...- me acerque a ella tras recoger lo restante de mi ropa y la cogi de la mano incorporandola y con la otra afianze su cintura atrayendola hacia mi cuerpo.
Puse por encima mi chaqueta -vamonos de aqui, habra algun hotel o algo...- murmure encogiendome nuevamente de hombros.

Al menos esa batalla la habia ganado aunque...bete tu a saber como trata Said a un peluche...mi virginidad seguia en riesgo de todas maneras.

Hice caso aomiso a sus plabras sobre como pensaria del sugetador y le ignore tan bien que casi no me habia dado cuenta de que estaba estrechada contra el con aquella chaqueta encima y el proponiendo ir a un ¿hotel? o algo asi....

-Dejamelo a mi-dije con una sonrisa infantil-tusolo cierra los ojos ya veras.

Espera ha que lo hubiera hecho y entonces yo hice los mismo para chasquear despues de decir unas palabras en la lengua de los dragones los dedos, derepente todo a nuestro alrededro habia cambiado, el ambiente, los sonidos, al abrir los ojos estabamos frente aun inmenso hotel de 5 estrellas de la urbe

-Los dragones me han enseñado trucos nuevos-dije feliz

Suspire cansinamente y cerre los ojos tal y como me lo pidio. Segundos despues tras decir una cosa en una lengua antigua aparecimos frente a un hotel muy lujoso el condenado.

-mmm...vaya, y tu solista encontraste el hotel mas caro de la ciudad?- sonrei burlon soltando el amarre -si bueno es una asombrosa habilidad...- observe nuevamente la fachada y luego baje la mirada hasta la entrada -tu crees que nos dejen entrar con estas pintas?- solte una carcajada ironica.

Al final se habia notado que el hotel estaba escogido...bueno le heche el ojo hace tiempo en una rebista y queria verlo por mi misma, entonces Said dijo algo sobre las pintas que teniamops.....tenia trucos para solucionar jilipolleces de todo tipo.

Otra frase en la lengua de los dragones , chasqueo los dedos y Said aparece con un traje negro y yo con un bestido tipo princesita en color vino

-Ahora vamos mas acorde a la ocasion-digo con tono dibertido esperando la reaccion del demonio al verde con un trage-¡¡magia¡¡

Kurai dijo nuevamente mas palabras en ese lenguaje antiguo -que demonios...- maldije mirando de arriba a abajo mi atuendo, los puños de la camisa, los incomodos zapatos negros...hasta llevaba..¿Corbata?

Desvie la mirada hacia ella -vaya Kurai...si pareces hasta de la realeza- me burle tomandola de la mano -en fin....vamos allá- murmure adentrandonos en el hall del hotel.
Un hombre llego a nosotros dandonos la bienvenida y pregunto si llevabamos maletas, negue con la cabeza y el tipo se fue.
Nos acercamos al mostrador y me quede con cara de poquer mirando al tio que estaba detras, me agache lo justo para susurrarle al oido estas palabras -haz un pco mas de tu magia y consiguenos dinero por que yo no tengo un duro...-

Escuche las plabras de said y tube que reprimir una carcajada.

-Tu atento a esor-le susurre para despues acercarme yo misma al mostrador-Señor, tengo una habitacion reserbada a nombre de Kurai-el hombre me miro y despues miro a Said, parecia que era posible abrio el libro y entonces dije la palabra del hechizo que tocaba...mi nombre estaba en la lista.

-¡HO¡ la señorita Kurai, es un placer tenerla en nuestro humilde hotel-dijo haciendome la pelota-no todos los dias se puede disfrutar del belleza y la presencia de alguien que tiene una habitacion alquilada todo el año-me dio upaquete con papel dorado-esto es un presente del hotel anuestros mejores clentes, por descontado el servicio de habitaciones y todos los extras usted los tiene gratuitos-me dio la llabe y me indico el piso-que tengan una buen estancia

Camine hasta SAaid con una sonrisa dibertida-tenemos la mejor habitacion del hotel de por vida-rei traviesa-me encanta hacer esto

Aguarde con cierta impaciencia a que ella lo arreglara, mientras me cruzaba de brazos. Explico que tenia una reserva, me miro y alce una ceja. Kurai volvio a hacerlo y el tipo se volvio de lo mas asquerosamente adulador...

Bufe como un gato cuando este se dio la vuelta -un poco mas y te lame lo que le pidas- murmure molesto volviendo a mirar a Kurai -bueno...y yo que pensaba que estabas en el infierno por error y eras un angel...fijate tu...- sonrei de lado y la tome de la mano caminando hacia el ascensor.

Le di al interruptor y la puerta se abrio, el ascensor por dentro tenia espejos y pude observarme mejor -mierda...estoy ridiculo..- murmure aflojandome la corbata, en realidad queria quitarmela y no sabia como, asi que comenze a tirar...pero la muy hija de su madre se cernia mas sobre mi cuello.

Cuando el humano se dio la vuelta y me acerque a Said pude escuchar sus comentarios, el primero lo ignore, pero cuando dijo el segundo no pude evitar ruborizarme como una tonta.

-Gra..gracias Said-conteste a aquel coemntario-de todas formas yo nunca seria tan bonita como un angel, aun que me ha gustado que pensaras eso de mi-la verdad es que los demonios y los angeles podian ser tremendamnete parecidos en belleza y actos, la verdad es que Kurai escondiendo las alas podria pasar por un angel travieso y jugueton de los que habia muchos en el cielo

Acepte la mano de mi acompañante y nos encaminamos al ascensor que resulto estar lleno de espejos, la verdad es que por mucho que el dijera que estaba ridiculo a mi me parecia que aquella ropa le sentaba francamente bien y estaba muy atractivo.

Said comenzo a "pelearse" con la corbata y yo no hacia mas que ver que al final se extrangularia con ella por bruto, pose mis manos sobre las sullas instandole a parar de dar tirones y fui tranquilamente deslizando el nudo de esta hasta que quedo floja de nuevo y el se la podia quitar.

El ascensor paro dando paso a un largo pasillo ricamente adornado con sillones de cuero para esperar, lamparas de cristal, alfombras de terciopelo.....

-Ya solo con ver el pasillo que nos lleba a las habitaciones me duele el bolsillo y eso que no he tenido que pagar nada-susurre al vil que estaba conmigo-bueno da igual vamos-caminamos hasta la ultima puerta de todo el pasillo, la habitacion 735 (planta 7 habitacion 35)-toma la llabe-se la tendi para que abriera

Kurai hizo el favor de ayudarme con eso y me la quito... "En cuanto llegue a la habitacion esa la quemare" me dije con un amenazador brillo en los ojos, apretando ese trozo de tela entre mis manos.

Caminamos a traves de ese lujoso pasillo, llevaba mis manos tras la cabeza y avanzaba a grandes zancadas como solia hacerlo.
Recibi la llave que me dio Kurai...era una cosa extraña...cuadrada, bueno no hacia falta ser muy inteligente como para no saber que esa cosa se introducia en la ranura. Asi lo hice, sono un "pi" y la puerta se abrió -jajaja...a veces la magia de los humanos es muy interesante- murmure guardando la tarjeta en el bolsillo de la camisa.

-Jo...der...- exclame viendo todo el lujo. Nada mas entrar, vi que las paredes estaban tapizadas de rojo, todo aquello tenia una ambiente arábigo. En el centro habia una cama sobre una plataforma redonda, un gran espejo a su lado, y varios sillones, con cojines de colores alrededor de una preciosa mesa que tenia sober ella un juego de te bañado en plata. Mas allá habia un escritorio, pero lo mejor era la ventana. Al encontrarse la habitacion en la ultima planta del hotel desde ahi se podia contemplar la urbe de los mas pudientes.

Al ver la habitacion me quede con la boca abierta, jamas de los jamases me ahabria imaginado algo asi, de tan lujosos que era me daba hasta repelus, entre en el cuerto, quedandome pasmada con todos los pequeños detalles y finalemnte acabe frente a la ventana, mirando le exterior con una lebe sonrisa, desde aqui se veia todo el mundo de los rcos en la urbe pero....no se podia ver toda la pobreza que yo sabia que existia en estos lugares.

El telefono del cuerto sono y me acerque yo misma a cogerlo con miedo de que Said lo tirara por la bentana por el ruido

-Si digame-respondi nada mas colgar-si todo esta a nuestro gusto-continue escuchando la voz tras el apaprato, ¿cenar? un segundo por favor-mire a Said- diecen que en la cocina hay de todo...yo si tengo algo de hambre .... voy a pedir para los dos ¿vale?-no espere a que me contestara y segui abalando con el interlocutor del telefono-un filete de ternera muy muy poco hecho, casi que si muje la ternera des de el plato mejor-sonrei traviesa-una racion de espaguetis a la carbonara, tarta de chocolate con helado de vainilla y para beber-me quede pensatiba unos segundos- un jarra de zomo de naranja tamaño industrial y otroa mas o menos igual de cerbeza-escuche como la persona al otro lado daba el pedido y otras voces se quejaban y hacian comentarios extraños-20 min...vale, adios-colgue el telefono y sonrei a mi acompañante, habia llegado el momento de ver que habia dentro de aquel paquete que me habian dado.

Abri el paquete y encontre en su interiro un camison negro con trnspariencias y un juego de poca interior a jugo, una bata y hata unas zapatillas de andar por casa con incrustaciones de cristal para adornar, con aquello en la mano me meti en el baño y me cambie de ropa, la verdad es que el vestidito me empezaba a molestar mas que otra cosa y tenia curiosidad de que diria Said al verme cn aquello puesto.

Mientras Kurai se dirigia a la ventana yo hice lo propio pero a la cama...ya tenia ganas de probarla. Me tire en plancha como si esta fuera de agua y quisiera romperla. Ni muy dura ni muy blanda, confortable -ajaja, la robare y me la llevare a mi cuarto- murmure bromeando mientras me ponia boca arriba sobre ella, con las manos tras mis cabeza y las piernas cruzadas.

El telefono sono con ese sonido horrible...y Kurai fue a cogerlo con rapidez, me conocia bastante bien. Pidio comida, tambien me conocia bien en ese aspecto, una ternera que hace mu y una jarra de cerveza, a este paso me volveria un alcoholico de cuidado.

Suspire lentamente y cerre los ojos, bosteze mientras observaba vagamente como ella se iba a otra habitacion a quitarse el traje.
-Estupendo..- murmure tirando la chaqueta negra a un lado, hice lo propio con las zapatillas quitandomelas de una vez sin usar las manos, tirandolas mas alla de los sillones, me desabroche un par de botones de la camisa. Ahora si se estaba mejor...

Me daba algo de verguenza ponerme aquello pero bueno, todo era por la curiosidad de como me vria con ese tipo de ropa y de como reaccionaria Said.

Termine de cambiarme y me dirigi de nuevo a la habitacion viendole sobre la cama con la camisa medio abierta y la chaqueta y los zapatos por alli tirados probocandome un gesto de molestia, me encamine a ellos y los recogi ordenando un poco lo que el habia tirado con sus lanzamientos y despues me encamine a la cama con ua sonrisa de "aqui no ha pasado nada".

-Hay pijamas en la comoda-suspire señalandosela-puedes cambierte de ropa si estas incomodo-sonrei y me colore un poquito-como he hecho yo

Cuando Kurai salió no pude creerlo... "Lo estas haciendo a posta?" me dije incorporandome levemente de la cama. La mire sin ningun pudor de arriba a abajo -bonitas ropas...muy atrevidas para una niña que solo quiere dormir conmigo inocentemente...no crees?- murmure con una media sonrisa, sentandome en el lado de la cama de la comoda.

Allí saque un pijama negro de hombre de raso, una tela fina y delicada -por favor...- murmure con ironia. Me quite todas las ropas sin reparos y me puse la parte de abajo del pantalon.

-Sabes Kurai, no dejo de pensar...que esta suite tiene un ambiente muy....bueno ya sabes, erotico- le dije de manera seductora, avanzando hacia ella a cuatro patas por la cama, como si fuera un felino -Ya ves...seda...cortinas rojizas..una cama redonda...- sonrei al acercarme a ella peligrosamente.

Parecia que poniendome aquello habia alterado la sangre del gato, ahora mismo no me fiaba demasiado de lo que pasaria pero bueno, queria ver como abanzaba la cosa

-¿no me queda bien?-dije abriendome de brazos y con ello retirando parte de la bata dejando ver aquel camison semi transparente-jo, yo que pensaba que si...que pena-agache la cabeza con fingida pena y asi depaso evite verle desnudarse, solo la alce cuando le tenia de nuevo enfrente a cuatro patas sobre la cama mirandome de aquella manera....

-Bueno es un bonito cuarto-conteste con una sonrisa de inocencia total e inmaculada-la verdad es que no se que te puede estar pasando por la cabeza-yo tambien me acerque a el un pococ mas, notando como su calida respiracion impactaba en mi rostro-y no negare que me pica la curiosidad pero....-suspire y bese su frente de manera juguetona-el postre se toma despues de cenar y no antes-dicho esto me separe de el para sentarme en uno de los sillones sabiendo que el camarero ya venia por el pasillo con nuestra cena

Sonrei ante sus palabras...inocencia enmascarada por curiosidad. Antes de que se dirigiera hacia el sofa la tome del brazo y la obligué a quedarse sobre la cama, me situe encima y acerqué mi rostro al suyo, pasando mis labios por su mejilla, aunque en realidad queria oler su aroma...hice lo propio con su cuello bajando hasta llegar cerca de sus pechos. Levante la mirada jugueton y bese suavemente sus labios mientras mantenia sus dos bracitos aferrados con mis manos.

Alguien llamo a la puerta, frustrando mi diversion. Bufé y me recoste a su lado dejandola libre -muy bien...el postre se toma despues de cenar y no antes- repeti con cierta burla, esperando a que abriera al camarero.

Definitibamene era mas dificil de lo que yo me empeñaba en creer el dominar esa parte de Said, sabia que tarde o temprano acabaria haciendo su santa voluntad y lo peor es que casi deseaba que ocurriera asi.

El me cogi haciendome tobar sobre la cama y colocandose sobre mi, besando mi mejilla, mi cuello, bajando pococ a poco con aquel roce hasta cerca de mis labios y despues mirandome con aquel gesto jugueton mientras me sostenia de los brazos con una de sus manos...la verdad es que no me iba a resistir de todas formas.

Me salbo el camarero tocando a la puerta, aun que escucharle repetir mis palabras sobre el postre me habia confirmado que seguramente despues regresaria a la carga.

Me incorpore de la cama colocandome bien la ropa y tapandome con la bata para abrir al camarero que paso con aquel carro con bandejas

-Buenas señorita-me saludo-traigo la cena que han pedido, carne muy poco hecha-habrio la bandeja y pude ver como aquel filete semi crudo todabia sangraba, -espaguetis -con mucho tomate y carne picada-tarta de chocolate-aquello era el pastel entero-la cerveza y el zumo de naranja-dos enormes jarras de ello-¿esta todo?-yo asenti con la cabeza y el coloco las bandejas sobre la mesa para despues marcharse co una sonrisa-por cierto me han dado esto para usted, casi se me olvidada-me tendio una rosa negra con una tarjeta-la trajo un niño-dicho esto se marcho y yo me quede con cara de idiota mirando aquello, mirando aquella targeta que ponia "Para la princesa Kuray de su mas humilde sirevo Lucifer, en honor a la ceremonia que algun dia llegara"

Todo lucia endemoniadamente divino. Hasta me cayó bien aquel sujeto, seguramente por que trajo aquella suculenta cena. Me incorpore y camine tranquilamente hacia alli, observando a Kurai de espaldas, al parecer le habia dado algo mas el tipo aquel, una rosa negra y una nota...ya no me caia tan bien.

-¿Que es eso?- pregunte fingiendo indiferencia, tomando asiento en la mesa -vas a venir a cenar?- agregue haciendo crujir mis nudillos antes de tomar el tenedor y el cuchillo.

Odiaba con toda mi alama que pasara esto, ¿como lo hacia? ¿como demonios me habia localizado?...no lo entendia.

Me sente junto a Said mirando aquella rosa y la targeta, con una sonrisa triste y la deje tal cual metida en una de las copas de caba que adornaban la mesa para despues mirar a Said

-¿Sabes una cosa?-mi triste sonrisa no se alejaba de mi mientras miraba aquello-es un regalo de Lucifer....un recordatoria de que segun el algun dia nos casaremos-suspire-la verdad es que es alguien muy atento pero....-sacudi la cabeza, queria eliminar aquella posibilidad de mi mente, lo que tubiera que pasar lo dictaria el tiempo y mi destino.

-¿Esta bueno?-pregunte a mi acompañante con una sonrisa feliz, aquella que solo era para el-seguro que lo mio esta de muerte-me servi zumo en un baso y destape mi bandeja mirando aquel plato ya con menos hambre que al prionciio y comence a comer en silencio-la verdad es que si esta muy bueno....

No le quite la vista a la tarjeta en ningun momento hasta que Kurai habló. Por su expresion, por su rostro ya sabia de quien venia ese pequeño regalo...ese molesto principe de los infiernos....

Chasquee molesto ante su situacion, el tio no paraba de acecharlo... ¿Por que no podian entender que si ella no queria casarse no lo iba a hacer? Me ponia enfermo ese tema, con gusto iria ante el mismisimo señor de los infiernos y lo dejaria esteril de una patada.
-Capullo...- susurre fijando mi vista en el filete.

Ante su cambio de actitud yo actue igual -eh...espera que lo pruebe- murmure cortando un pedazo para masticarlo -seh...esta bueno, aunque ya sabes, me gusta mas cazar mi propia comida- me encogi de hombros y tome un poco de cerveza.

Sabia que mi situacion como princesa...no mi situacion como lider de los viles era muy dificil, mi mano habia sido concedida a mi primo Nero cuando yo tenia 6 años y ni tansiquiera podia acercarme al castillo por que era la hija de unos simples soldados, por otra parte el mismisimo rei del infierno Lucifer me pidio en matrimonio nada mas me comberti en la lider y se pasa la vida embiandome al antigui principe de los viles, un traidor que es el primer diablo existente para que me lo recuerde demasiado amenudo y finalmente esta Said, aquel a quien quiero, un general de mi propio ejercito, con muy mal genio y que me ha robado el corazon......es la unica persona con la que yo queria casarme y a la vez aquella con la que no lo podre hacer.....tengo que casarme con mi primo fue el ultimo deseo de mis padres antes de morir, su ultima voluntad....

-Me alegro de que te guste la comida-sonrei continue con lo mio-la verdad es que pensaba que despues de lo de la ambuergueseria serias capaz de comerte al botones-rei traviesa guiñandole el ojo-es un alivio, la verdad.

La comida continuo tranquila mientras yo miraba el reloj y la rosa una y otra vez, calculando un tiempo determinado en el que aquella simple flor tomaria su verdadera forma no quedaba demasiado...simplemente 20 minutos despues de llegar se ilumino en negro y cambio combirtiendose en una caja de terciopelo que tome entre mis manos sin mirar siquiera a Said y la abri, un aniñño con un diamante del tamaño de un garbanzo, cerre la caja y la deje sobre la mesa sin hacerle menos caso, continuando con aquel plato como si aquello nunca hobiera pasado

Continue comiendo aunque con el ceño ligeramente fruncido, no me sacaba esas mierdas de la boda de la cabeza.
Asenti distraido -eh...como crees que me lo comeria...se le veia muy delgaducho, no tenia chicha- dije tratando de volver a aquel tono burlon.
Continue con el filete de marras, hasta su sabor se me estaba amargando. Deje los cubiertos y me ventile de un trago la enorme jarra, soltando un gran suspiro al final.
Cuando la rosa comenzo a transformarse y al abrirlo Kurai un brillo destello sobre su rostro, se me llevaron los diablos, literalmente.
Me levante -no tengo mas hambre- dije con voz inexpresiva y me acerque caminando tranquilamente a la ventana, con las manos metidas en los bolsillos del pantalón. No podia creerlo, estaba jodidamente celoso de ese cabron de Lucifer...

Vi a Said lebantarse molesto y supe inmediatamente que era por todo aquello, Lucifer proboca celos y sentimientos negatibos en aquellos a los que quiere dañar o corromper, y Said estaba sufriendo eso con unos celos sin sentido

Me incorpore de la mesa, dejando alli lo que quedaba de comida y me hacerque a el con una lebe sonrisa

-Said tengo centenares de aniños como ese-supire-collares , pendientes, ropa muy cara, juguetes.....tengo miles de cosas que me haregalado el y todas estan metidas en una celda del calabozo, solo las miro cuando me las da o las hace llegar a mi, despues de eso las dejo alli, por que al fin y al cabo aun que yo no las quiera tal vez otra persona si y las puede coger-me coloque asu lado con expresion ausente-las cosas que te regala alguien a quein no quieres o que no te gusta para nada no son especiales, sonrei lebemente- en cambio si tu me regalaras aun que fuera una flor cojida de mi propio jardin, para mi seria el mas preciado de mis tesoros, la secaria y conservaria toda mi vida junto a mi cama para cada vez que me acostara pensar en que alguien a quien quiero me la ha regalado, pensaria en ti-mire por la ventana-yo no necesito a alguien que me pueda vindrar el mundo a mis pies, si no a alguien que me quiera tanto como yo a el, y esa persona eres tu, ni tan siquiera aprecio tanto a mi primo y prometido Nero-busque su mano y la entrelace con la sulla-tu eres la persona mas especial para mi

Escuche pacientemente sus palabras sin mirar su rostro, estaba ciertamente avergonzado por todo lo que me estaba diciendo y no queria que mirara mi rostro.
En el fondo por mucho que me dijera todo aquello, por mucoh que me lo demostrara....que posibilidades tenia con ella? Estaba callendo en esa mierda que llaman amor...y por culpa de esa mierda estaba temiendo...realmente podia hacer algo para evitar esas dos bodas?

-Entonces te regalare algo...y como lo vea en esa celda, o se pudra o algo, veras que demonio puedo ser- dije con el ceño nuevamente fruncido aunque con palabras suaves -de todas formas, no tengo mas ganas de comer- me gire poniendo una mano sobre su largo cabello blanco, acariciandolo. Sonrei muy brevemente, casi imperceptible y separandome de su mano me dirigi a la cama en donde repose boca a abajo.

Le escuche ablar sonriendo feliz por sus palabras y agradeciendo mas que nada en el mundo aquel gesto de acariciar mis cabellos, aun que sabia que le seguia pasando algo, y sabia perfectamnete lo que era, mi futura boda, la que fuera con quien fuera.

Said se fue a la cama alegando que ya no tenia hambre y yo le segui tumbandome junto a el y acariciando con una de mis manos su cabellos, su cuello y su espalda mientras escuchaba el rumiar de su cabeza con aquel tema.

-¿No te parece que es muy pronto para que te preocupes por quein sera mi futuro marido?-no deberia dar muestras de que podia saber en que pensaba pero se me ecapo-bueno...esto...¿por que es eso en lo que estas pensando no?, esque con el temita del regalo de Lucibueno-intentando disimular-se me ha ocurridop que seria por eso ¿me equiboque?

Note sus manos acariciandome, era agradable.. cerre levemente los ojos, intentando apartar esos nefastos pensamientos de mi mente y entonces ella hablo, o mas bien la cagó.

-Kurai- dije de manera suave -La razon de por que pienso las cosas en lugar de decirlas es porque deseo que mis pensamientos se queden ahi...se lo que puedes hacer, ya me di cuenta hace mucho tiempo- agregue con la misma suavidad -y antes de que te pongas a llorar pidiendome perdon te dire...que no pasa nada, yo tambien lo haria si tuviera ese poder...-

Me gire para contemplarla, dios..tan solo era una niña..
-Esas preocupaciones las he tenido de siempre...mucho antes de que pudiera descubrir lo que sentia por ti, aunque...he de confesarlo, me jode igual- declare con una pasmosa y asombrosa tranquilidad, no parecia el mismo Said de siempre.